La Inquisición ofrecía mas garantías juridicas que los JVM

LA IZQUIERDA HOMOFOBICA. COMUNISTAS PERSIGUIENDO HOMOSEXUALES

In Historia, Ideologia feminazi de genero, Legislacion, Violencia homosexual lesbo on 27 julio, 2016 at 14:26

imageLas feministas de género manipulan a placer la Historia. El último mantra, falso por demás, convierte al capitalismo y en particular a los católicos conservadores en bestias negras de la persecución del lobby LGTB. Sin embargo, tienen muy buen cuidado en ocultar que donde de verdad se ha perseguido y exterminado a los homosexuales, no ha sido en las prósperas sociedades capitalistas que ellos llaman “heteropatriarcales”, sino precisamente en los países comunistas. La  por ellos idolatrada Cuba de Fidel Castro, albergó el primer campo de concentración del mundo exclusivo y exprofeso para estos “degenerados”. Ni qué decir tiene, a esta homofobia persecutoria tampoco han escapado los comunistas del mundo entero, especialmente los españoles hasta fecha muy reciente, aunque ahora pretendan vestirse con el disfraz de lagarterana homosexualoide y en pro de los supuestos derechos de este colectivo por ellos tan atacado y perseguido.

imageLa canallería y desverguenza de esta gentuza socialista y comunista que recién acaba de descubrir la utilización del lobby lgtb para sus propios fines no conoce límites, y en lugar de acusarse ellos mismos de la persecución sempiterna a homosexuales y lesbianas, han tenido la desfachatez de acusar a los demás de sus propias manías persecutorias.

Veamos quién ha perseguido más y mejor a los “degenerados” ofreciéndoles este compendio. pERO QUE QUEDE CLARO: nadie ha perseguido más a los homosexuales, despreciándolos, tildándolos de enfermos, torturándolos y encarcelándolos, que los partidos y los regímenes de extrema izquierda

 


Jesús Laínz

Izquierda y homosexualidad

image

 

 

2016-06-17

33

Bien claro lo han dejado los socialdemócratas: la culpa de lo de Orlando es del heteropatriarcado homófobo, o de la homofobia heteropatriarcal, o como se diga. Apenas cursi. Pero el asunto no termina ahí, pues estamos hablando de USA, nada menos que el paraíso reaccionario de las armas de fuego. Todo encaja: han sido los fachas. Y TVE, apresurándose a confirmarlo mediante la ilustración de la noticia con unaviñeta en la que aparecía un hombre apuntando a un homosexual con un fusil en forma de cruz.

El hecho de que el criminal sea un musulmán de origen afgano y de que lo haya reivindicado el Estado Islámico no es relevante. El esquema progre es el que es, y cuando la realidad no encaja en él es porque la realidad se equivoca. En eso consiste la izquierda.

Pero vayamos por partes. Para empezar, nadie mejor que Marx y Engels, heteropatriarcas socialdemócratas por excelencia. Pues tanto el uno como el otro concebían que la homosexualidad era una degeneración producto de la sociedad capitalista que habría de ser sanada con la llegada del socialismo. El primero, tras la lectura del libro Sobre la libertad de conciencia, calificó al autor, Karl Boruttau, de "maricón estúpido". Y el segundo dedicó a la homosexualidad epítetos como "abominable", "despreciable", "degradante" y "extremadamente contra natura".

Sus discípulos tomaron buena nota. Stalin, por ejemplo, premió la homosexualidad con varios años de vacaciones en Siberia (art. 121 del Código Penal). La doctrina oficial soviética sobre la homosexualidad consistió en considerarla contrarrevolucionaria y producto de ladecadencia capitalista. No sólo eso, sino que se la vinculó de manera muy especial con el fascismo. Wilhelm Reich relacionó la homosexualidad con el sadismo característico de los fascistas, mientras que Máximo Gorky, en un artículo titulado "Humanismo proletario", explicó que la Unión Soviética estaba obligada a perseguir a los homosexuales para proteger a la juventud de su influencia corruptora. Y propuso esta medida: "Exterminemos a todos los homosexuales y el fascismo desaparecerá". Por otro lado, la propaganda soviética de la época, tanto con palabras como con imágenes, denunció a menudo el afeminamiento de los nazis. Y sus camaradas del Partido Socialdemócrata Alemán solieron referirse al partido de Hitler como la "Hermandad de Mariquitas de la Casa Parda". La verdad es que Röhm y compañía se lo pusieron en bandeja.

Si así estuvieron las cosas de la homosexualidad en la URSS hasta su despenalización por Yeltsin en 1993, los izquierdistas de otros países no se quedaron atrás. En Francia, por ejemplo, Daniel Guérin, dirigente comunista considerado hoy el padre del movimiento homosexualista francés, escribió en 1955 que, al denunciar la opresión sufrida por los homosexuales en su país, sabía que las críticas más "feroces" iban a proceder de "ambientes marxistas". Y veinte años más tarde denunciaría la homofobia dominante en la izquierda de la segunda mitad del siglo XX: "No hace tantos años que declararse revolucionario y homosexual eran cosas incompatibles".

Por lo que se refiere a la Cuba del socialdemócrata Fidel Castro, bastaría con recordar las palabras de Reinaldo Arenas sobre el hecho de que, poco después de la revolución, "comenzó la persecución [a los homosexuales] y se abrieron campos de concentración". Lo supo por experiencia propia.

Precisamente de Cuba regresó el oscarizado fotógrafo Néstor Almendros, previamente emigrado a la isla antillana junto con su familia, distinguida por su militancia izquierdista. En la biografía que puede encontrarse en internet se cuenta que, opuesto al nuevo régimen comunista, se marchó a París. Pero en medio hay una escala que se oculta sospechosamente. Instalado en la Barcelona franquista de 1962, conoció los locales de ambiente homosexual que frecuentaban Jaime Gil de Biedma y Terenci Moix. En su autobiografía Extraño en el paraíso, este último recordó una trifulca entre Almendros y Biedma, que le llamó "gusano" por haber abandonado el paraíso castrista.

–Coge a todas estas locas y llévatelas a Cuba –respondió Almendros señalando a los danzantes enfundados en marabúes–. ¿Crees que te dejarán montar una bacanal como ésta? Al primer plumazo os meten a todos en un campo de regeneración.

–Eso es lo que diría cualquier burgués indocumentado –gritó Biedma–. Nunca pensé que el hijo de una familia que se ha caracterizado por su lucha en favor de la libertad acabaría convertido en un fascista.

Concluyó Moix explicando que aquel trato fue "el mismo que recibió de cuantos intelectuales izquierdistas intentó frecuentar en Barcelona. No se ha contado suficientemente que, si Néstor no se quedó entonces, fue debido al desprecio de la progresía local".

Ironías de la vida, algún tiempo después el Partido Comunista denegaría la afiliación al fervoroso Biedma por homosexual.

Han pasado algunos años y, dado que el capitalismo se ha demostrado mucho más capaz que el fracasado socialismo de facilitar una vida digna a la mayoría de la gente, la izquierda ha tenido que hacer hincapié en otras causas para poder seguir existiendo: el odio a Occidente, especialmente al cristianismo, la yanquifobia, la islamofilia, la negación de la nación española, la amistad con cualquier separatismo, el apoyo ilimitado a la inmigración, la defensa del derecho a la vida de los toros, la negación del derecho a la vida de los humanos, la ideología de género o la nueva corrección política homosexualista (que no es lo mismo que la homosexualidad).
Cada uno que opine y defienda lo que le dé la gana. Pero antes de tirar la primera piedra a los heteropatriarcales…

www.jesuslainz.es

http://www.libertaddigital.com/cultura/historia/2016-06-17/jesus-lainz-izquierda-y-homosexualidad-79295/



‘El trabajo os hará hombres’, así curaba el Ché a los gays

El Ché Guevara fue el organizador de la construcción del primer campo de trabajos forzados en la península de Guanahacabibes. Sería una más de las decenas de prisiones que la revolución cubana si no fuera por la tipología de los presos a los que estaba destinada, al menos inicialmente. A la entrada del campo, copiando el lema que presidía el campo de concentración Aushcwitz, podía leerse “El trabajo os hará hombres”, y el centro estaba destinado a albergar homosexuales. Poco después se aprovecharon estas instalaciones, y las de los otros dos campos que se construyeron en la misma zona de Cuba, para encarcelar a “aquellos casos dudosos de los que no estamos seguros de que deban estar encarcelados (…) mandamos a Guanahacabibes a la gente que no debería ir a la cárcel, gente que ha cometido crímenes contra la moral revolucionaria…”

chepistola

 

Este campo sirvió de modelo para que en la provincia de Camagüey se generalizase la detención, tortura y asesinato de homosexuales, católicos, sacerdotes,… personas que no habían cometido crímenes pero cuya moral se situaba frontalmente a los principios que establecían como revolucionarios desde la nueva autoridad revolucionaria de Cuba. En este proceso de detenciones masivas tuvo un papel principal, al igual que ocurriera con los fusilamientos en masa en La Cabaña, el Ché.

Quienes eran trasladados a estos campos de concentración, generalmente hacinados en camiones, llevaban en su hoja de ingreso el delito de “desadaptados”. Los testimonios de los supervivientes de aquellas prisiones han contado, una vez fuera de Cuba, como la mayoría de los presos nunca regresaron. Allí se producían violaciones, mutilaciones y palizas continuamente. Brutalidades que se cometían, según declararon los supervivientes, con la intención de reconducir las conductas. Especialmente se ensañaban con los homosexuales a quienes repartían los trabajos más duros y desagradables, aquellos en los que se necesitaba más fuerza física.

campoconcentrgais

A partir de los años ochenta, un nuevo tipo de presos empezó a poblar las prisiones de Camagüey, especialmente los centros como Guanahacabibes: los enfermos de SIDA,que lejos de recibir tratamientos médicos, eran considerados como víctimas de sus conductas contrarrevolucionarias.

Si inicialmente fue Guanahacabibes el centro de reeducación de homosexuales, pronto otro campo de concentración, el de Cerámica Roja tomó el relevo. Como explica el preso Rolando Castro Sánchez, los homosexuales, especialmente los travestis, eran especialmente maltratados: “Los obligan a que se vistan como hombres, les quitan todas sus prendas de vestir y se las botan; los ofenden, diciéndoles ‘maricones asquerosos’, que deberían haberse muerto antes de haber nacido”.

 

En estos centros, según han relatado las víctimas de las torturas que allí se cometen, a los carceleros se les conocía como los reeducadores, a las celdas los departamentos y las celdas de castigo son los lugares donde se producen las palizas, los abusos y las violaciones a los homosexuales.

En total funcionaron como cárceles para homosexuales los presidios de  todas ellas se encontraban en la zona de Camagüey y en todas ellas el objetivo era la reeducación de los homosexuales para evitar que mantuvieran conductas que, como el propio Ché describió, eran contrarrevolucionarias.

celda

Puedes comentar el blog con el autor en @Juanerpf o en la página de Facebook Los Crímenes del Comunismo.

Otras entradas del blog Crímenes del comunismo que te pueden interesar:

– Checas en la Guerra Civil, la represión soviética para exterminar a sospechosos

– La base racista del comunismo y el racismo de los viejos comunistas

– Venezuela, el socialismo criminal que Podemos se niega a condenar

– Los ocho carmelitas asesinados en agosto de 1936 a los que Carmena ha retirado la placa

– Stalin, el genocida adorado por la izquierda española

– Alberti, entre poesías y paseos al enemigo fascista

– Terra Lliure, el brazo terrorista del separatismo catalán

– El alcalde de Lérida que fue fusilado por celebrar una cabalgata de Reyes

Hungría, represión a sangre y fuego para imponer la ortodoxia comunista

– Quemar derechistas, la cruel diversión frentepopulista

Bombardear civiles, una práctica frentepopulista manejada por su propaganda

Toledo, dos meses de orgía de sangre hasta la liberación del Alcázar

André Marty o fijar el precio de la vida humana en 75 céntimos, el precio de un cartucho

– La violación, un arma del Frente Popular para humillar al enemigo.

– FRAP, ‘viejos republicanos’ que seguían matando en la Transición.

– Fusilando entre "porvos" con la lola y dormidas con el camarada Palomeque.

– Los 18 mártires de Cóbrece, ahogados y descuartizados por odio a la fe.

La macabra diversión de los represores frentepopulistas

– Terrorista a los que los comunistas consideran héroes

– El linchamiento de los prisioneros en el Cuartel de la Montaña

– Las 13 rosas, otro mito de la izquierda que gusta a la clase política.

– Así depuraban los comunistas españoles, los 46 fusilados de la 84 Brigada Mixta.

– Martirio y asesinato de las 27 Hermanas Adoratrices.

– La mina de Camuñas, un Katyn republicano en plena Mancha.

– Mártires concepcionistas, 14 víctimas del odio comunista a la religión católica.

– Violaciones en la Polonia ‘liberada’, la brutal estrategia militar comunista

– Las violaciones en masa cometidas por el Ejército Rojo

– ¿A qué se refieren los podemitas con ‘Arderéis como en el 36’? (Primera parte)

– ¿A qué se refieren los podemitas con ‘Arderéis como en el 36’? (Segunda parte)

– ¿A qué se refieren los podemitas con ‘Arderéis como en el 36’? (Tercera parte)

 

http://gaceta.es/juan-e-pfluger/trabajo-hara-hombres-curaba-che-los-gays-25022016-1907



LOS MARICAS Y EL PCE SEGÚN SANCHEZ DRAGÓ

 

Sánchez Dragó recuerda cuando la izquierda perseguía a los “maricas”

"Nadie ha perseguido más a los homosexuales, despreciándolos, tildándolos de enfermos, torturándolos y encarcelándolos, que los partidos y los regímenes de extrema izquierda", afirma Dragó.

Actuall

03/07/2016

Compartir en Facebook

Compartir en Twitter

altFernando Sánchez Dragó / EFE

Durante el Orgullo Gay de este sábado se volvió a ver una connivencia y sintonía total entre los representantes del lobby gay y los distintos partidos de izquierda, que desfilaron uno tras otro por la marcha. Lleva ya muchos años asociándose a la izquierda con el colectivo gay pero en un artículo publicado en El Mundo que por su interés reproduciremos íntegro, el escritor Fernando Sánchez Dragó recuerda cuando esto no era así y la izquierda era la que perseguía a los homosexuales:

Nunca he entendido por qué la identidad sexual, ya sea homo, hetero, bi, tri, trans, pan (como la mía) o poli, tiene que ser motivo de orgullo, pero celebre cada cual lo que le venga en gana. No es de eso de lo que hoy quiero hablar, sino de la sorprendente afinidad que aún subsiste entre la izquierda, chupona siempre a la hora de arramblar con votos que no le corresponden, y quienes esgrimen la bandera del arco iris.

Lo digo porque, año tras año, los políticos zurdos se encaraman a los carromatos del desfile, saludan desde sus plataformas a quienes desde el asfalto los jalean y son recibidos con vítores, besos y achuchones. La derecha, en cambio, se queda acoquinadita en sus cubiles, e incluso, como en esta ocasión, los organizadores llegan al extremo de advertir a los miembros del PP de que su presencia no es grata. Curiosa actitud si consideramos que nadie ha perseguido más a los homosexuales, despreciándolos, tildándolos de enfermos, torturándolos y encarcelándolos, que los partidos y los regímenes de extrema izquierda.

Aunque es cosa bien sabida y mil veces demostrada, contaré una anécdota elevándola a categoría. No es la primera vez que lo hago. En 1958, miembro yo y otros 17 compañeros del Partido Comunista, y encontrándonos todos en la cárcel de Carabanchel, solíamos recibir en mi celda, que era ágora de apasionadas tertulias, a un raterillo de Málaga, casi adolescente, bonísima persona y prácticamente analfabeto, lo que no le impedía seguir nuestras discusiones en respetuoso silencio, pero con pasión idéntica a la que nosotros vertíamos en ellas.

“Somos presos políticos y no podemos aceptar trato alguno con un marica, pues eso nos deshonra a los ojos de la población reclusa”, afirmaba un miembro del Comité del Partido Comunista

El raterillo tenía un discreto deje afeminado. Duró ese amistoso toma y daca cosa de un mes. Un mal día, a su término, nos convocó el ceñudo representante del Comité Central para conminarnos a prohibir la entrada en la celda al malagueño. “Nosotros”, adujo aquel animal de bellota estalinista, “somos presos políticos y no podemos aceptar trato alguno con un marica, pues eso nos deshonra a los ojos de la población reclusa”. Y, no contento con eso, exigió que le explicáramos la razón por la que le cerrábamos el paso.

Pues bien: lo hicimos, a mayor gloria de la obediencia revolucionaria, e inmediatamente, cuando ya era tarde, nos arrepentimos. Ignoro lo que fue de aquel muchacho, pero aún me rechina el alma cuando pienso en él. Es la mayor (si no la única) vileza en la que he incurrido a lo largo de mi vida.

http://www.actuall.com/criterio/familia/sanchez-drago-recuerda-cuando-la-izquierda-perseguia-los-maricas/



"El trabajo os hará hombres", el lema del castrismo para matar el "orgullo"

Pablo Iglesias bailó la conga el Día del Orgullo Gay olvidándose de la represión homófoba de sus referentes políticos, Fidel Castro y el Che Guevara.

 


Tarde de verano en la isla. Mediados de los años 60. La plaza está que arde. El ambiente es brutal. Chicos con media melena y chicas con pelo corto. Chicas con ropa amplia, sentadas sin preocupación y chicos con camisas ajustadas, músculos prietos a la vista y las piernas cruzadas. Locos y locas, ebrios de juventud. Cubanos en estado de alboroto y de excepción. Pero en La Rampa, en los parques céntricos de La Habana, en el Jardín Botánico, en determinadas calles de ambiente alguien siempre mira; y ficha. Los delatores son más. Informantes con uniforme casual, envidiosos, mansos a los que basta ponerles la venda en las manos para que ellos se tapen convencidos los ojos. Podríamos comprender el miedo, la ignorancia, la fuerza de la propaganda utópica, la debilidad humana y lo cara que es la valentía. Pero otros preferían jugársela por bailar a The Beatles a mediados de los años 60 en la Cuba de Fidel.

Hay quien estrena pantalones, o bigote a lo Ringo, otros tantean la primera cita, o van a por la segunda, (para mi gusto la mejor). La de hoy acabará en un autobús sellado. 10 horas de viaje. Pueblos y pueblos en los que tampoco se para. Gritos de auxilio y de "¡agua, agua!" por las ventanillas del ómnibus. Deposiciones, sed, hambre. Cháchara. Llegada de madrugada a grandes estadios deportivos sobre iluminados, como un plató de cine. Y de allí a zonas agrícolas.

Y de los pasajeros lee antes de desembarcar: "El trabajo os hará hombres". Llegaron a ser 25.000. Y se dice, "ni lo pienses, loco". Otro en cambio, por ejemplo, el poeta José Mario Rodríguez (1940 -2002) se da cuenta de que algún capo militar comunista interpreta el alemán. ("Arbeit macht frei", "el trabajo os hará libres", era la bienvenida de los nazis a los judíos en el campo de Auschwitz.

Hace 50 años la dictadura homófoba, racista y sectaria de Fidel Castro creó los campos de concentración, con vallas electrificadas y torres de vigilancia donde apartar a los "desviados sexuales, hippies, Testigos de Jeová, prostitutas"; "el lumpen" -palabra recurrente en el Che- de la sociedad cubana. Aquellos que hacían "ostentación de su desvergüenza", mitinaba Fidel con el dedo en alto.

Llamaron a los campos UMAP, Unidades Militares de Ayuda a la Producción. Siempre he preferido los tabús lingüísticos -un suspenso es un cate, nada de Necesita Mejorar-. Más tarde los "pájaros" (denominación de los homosexuales en cubano) enjaulados en esa noche de cacería producirían de sol a sol tabaco, azúcar, podarían las espinosas matas de aroma y a mano arrancarían de los campos las malas hierbas. La metáfora es obvia. Un año antes el capo y verdugo de la prisión de La Cabaña, Che Guevara, había dicho en Naciones Unidas: "fusilamos y seguiremos fusilando mientras sea necesario. Nuestra lucha es una lucha a muerte".

Hace 50 años, en 1965, empezaron las depuraciones morales, las humillaciones públicas y los allanamientos privados. La mal llamada revolución castrista se propuso, como en Europa, aniquilar el hombre interior. La propaganda del régimen, para no adelantar acontecimientos a los secuestrados en pandilla, les decían que iban al servicio militar.

Sin ropa, descalzos, la comida horrible, maltrato, trabajos forzosos, asesinatos, abusos sexuales, alfabetización, – "M de marxismo, R de Raúl, C de Castro"-, programas de re-educación con proyecciones Pávlov para extirpar la "extravagancia".

1984, el año de ‘Conducta impropia’

En 1984 se estrenó el documental Conducta impropia de Néstor Almendros y Orlando Jiménez Leal. Los directores entrevistaron a víctimas anónimas y con firma de las UMAP, "a esas locas las consigo yo" les dijo Reinaldo Arenas, refugiado en Nueva York. Producida por la televisión pública francesa (difamar fue decir que lo hizo la CIA) por imperativo del socialista que estaba al frente de la República, François Mitterrand. Con todo detalle, con pena y humor, se denuncia el maltrato de Fidel y el Che a los escritores y artistas homosexuales a mediados de los 60; los suicidios, las listas de nombres en los comités de vecinos, esos que veían en el amaneramiento la excusa perfecta para quedarse con la casa del marica que no la iba a necesitar en su nueva celda. Sí, igual que en la Alemania nazi. Cuando se estrenó en Francia, la cinta fue teatralmente criticada por Tomás Gutiérrez Alea, que casi una década más tarde dirigió Fresa y Chocolate (1993).

En los años noventa, el oasis calculado de esta gran historia, se volvió a esfumar en el desierto de la moral mortal comunista. Los homosexuales y transexuales cubanos siguen denunciando redadas, abusos, maltratos y exclusión. Son disidentes.

Y mientras, Pablo Iglesias baila la conga

Pablo Iglesias ha bailaba y saltaba en el escenario del Orgullo Gay el pasado sábado 4 de julio en Madrid. Con la bandera multicolor y la cara pálida (como Don Juan Tenorio al final de la función), el líder de Podemos defensor del "hito" del golpe militar de Castro y del Che, nostálgico de aquellos maravillosos años "de liberación y conquistas sociales" y por eso le dedicó uno de sus programas Fort Apache y al "sex appeal" que ahora ha perdido" Cuba.

 

Otras películas que denuncian la persecución del régimen castrista a éste y otros colectivos son Seres extravagantes (2003) de Manuel Zayas y narración de Reinaldo Arenas; Antes que anochezca (2000) de Julian Schnabel o Nadie escuchaba también de Néstor Almendros.

http://www.libertaddigital.com/cultura/libros/2015-07-09/el-trabajo-os-hara-hombres-el-lema-del-castrismo-para-matar-el-orgullo-1276552515/



 

http://tv.libertaddigital.com/videos/2015-07-09/conducta-impropia-6052360.html

 

‘Conducta impropia’: la represión del castrismo al colectivo gay

Libertad Digital ha extractado los testimonios más relevantes de Conducta impropia (1984) documental dirigido por Nestor Almendros y Orlando Jiménez Leal. No se lo pierdan.

2015-07-09

0

Las declaraciones de Fidel Castro que se incluyen son de 1979, una década después de la entrada en funcionamiento de los campos de trabajos forzados.



image

CHÉ GUEVARA: HOMÓFOBO Y ASESINO

Si hay en la propaganda de izquierdas un individuo cuya biografía se ha falsificado hasta la saciedad, esa es sin duda la vida y “milagros” de Ernesto Guevara. Es el típico caso o prototipo de manipulación a escala mundial, por el cual se coge a un ser mezquino sin escrúpulos, y aprovechando su eliminación o muerte, se le catapulta a la fama mundial e incluso se hace negocio de su figura y su muerte.
Pues no lo olvidemos, que en el mundo de la izquierda radical, no hay ningún “bobo”que no tenga en el fondo de su armario, alguna prenda de vestir, (camiseta, sudadera, pañuelo, pantalón o calzoncillos) que no tenga serigrafiado el rostro barbudo de éste asesino. Millones de prendas y objetos de mercadillo realizados en países “capitalistas” para solaz y disfrute de los niños pijos de izquierdas, que tras pedirles a sus papás un iPad y un viaje a Candanchú, se van con los camaradas, palestinas al cuello, y sus camisetas del Ché con fondo rojo, de “manifa” a la capital a protestar por los abusos del capitalismo y en contra de los “fachas”.
Bien. Repasemos un poco la biografía de este lindo asesino. No nos centraremos tanto en los datos biográficos, que tan abundantes son, sino más bien en esos aspectos tan llamativos de su vida, que pasan desapercibidos para los adoradores de su imagen.


CHÉ GUEVARA Y LOS HOMOSEXUALES

Por ejemplo, el movimiento del “orgullo gay”, como subproducto del radicalismo de extrema izquierda, es uno de los más populosos y “divertidos”que tiene ahora mismo la izquierda galopante. Sus “cabalgatas” y “fiestas” son centro de concentración, no sólo de radicales homosexuales, sino otros menos conocidos y más degenerados (hay quien se une a este tipo de movimiento para pedir la pedofilia, el bestialismo o la necrofilia como derecho de elección sexual) y es muy común que muchos de sus miembros porten camisetas del Ché. Pocos de estos indocumentados de posaderas alegres sabrán, que uno de los primeros en pedir el campo de concentración para homosexuales, fue su amado Ernesto Guevara, en concreto, dice el periodista Nicolás Márquez: “Pues bien, el Che en Cuba manejó dos campos de concentración y exterminio a disidentes y homosexuales (“La Cabaña” y“Guanacahabibes” respectivamente), ocupando seguidamente dos cargos burocráticos (Presidente del Banco Nacional de Cuba y Ministro de Industrias)”.
Y es que dentro del modelo revolucionario que querían implantar los hermanos Castro y Ernesto, la “bujarronería” no estaba bien vista, y dentro de la“moral” revolucionaria, el tener el culo inquieto, no era algo suficientemente revolucionario. Álvaro Vargas Llosa dice sobre este asunto en una entrevista realizada en su día sobre este “ídolo de masas”.
“Che: A Guanahacabibes se manda a la gente que no debe ir a la cárcel , la gente que ha cometido faltas a la moral revolucionaria de mayor o menor grado…es trabajo duro, no trabajo bestial”. Este campamento fue el precursor del confinamiento sistemático, a partir de 1965 en la provincia de Camagüey, de disidentes, homosexuales, víctimas del SIDA, católicos, Testigos de Jehová, sacerdotes afro-cubanos, y otras escorias por el estilo, bajo la bandera de las Unidades Militares de Ayuda a la Producción (UMAP).” (Álvaro Vargas Llosa, The New Republic “La máquina de matar: El Che Guevara, de agitador comunista a marca capitalista”.)
Como dirían algunos: “un cielo de hombre” este Ernesto. Y es que las cosas no son siempre lo que parecen. Vargas Llosa señaló también que “La homofobia ha sido parte del pensamiento de izquierdas, como elemento constitutivo de su cruzada por un "hombre nuevo", libre de las "degeneraciones" pequeño-burguesas”. (íbidem). Bueno, eso sería antes, ahora, la cosa ha cambiado mucho y el movimiento o lobby gay, es muy poderoso en todo el mundo, mientras que la izquierda de caviar los jalea y los utiliza.
En fin, que por mucho que pongamos la música a todo trapo y nos vayamos en un tractor al barrio de Chueca a celebrar el orgullo gay, Ernesto no va a dejar de ser lo que fue, un “genocida” de tres al cuarto, con más claroscuros que una vidriera.

CHÉ GUEVARA MATANDO CAMPESINOS

Porque, como todo tirano, sanguinario y sin escrúpulos, Ernesto era un hombre de “gatillo fácil”. No le dolían prendas en ejecutar a nadie por lo más mínimo. El periodista Matthew Campbell comenta:
“Ellos se hacían de la vista gorda a todo aquello que no encajaba con la imagen idealizada de Guevara. Un cronista prolífico, Guevara, sin embargo escribió vivamente de su papel como verdugo, en un pasaje que describe la ejecución de Eutimio Guerra, un campesino y guía del ejército, escribió: “Acabé el problema dándole en la sien derecha un tiro de pistola [calibre] 32, con orificio de salida en el temporal derecho. Boqueó un rato y quedó muerto. Este fue el primero de muchos “traidores” de ser sometido a lo que Guevara llamó “actos de justicia”. (Matthew Campbell,Behind Che Guevara’s mask, the cold executioner. The Sunday Times, September 16, 2007.)
¡Ah, la Justicia de los ídolos!, que bien suena eso. Ya se sabe que para la izquierda radical, una ejecución de este calibre (el 32, según el asesino Ernesto Guevara) no es ofensiva a sus principios. Sólo lo sería si quien realiza el disparo es otro que no pertenezca a su club de fanáticos asesinos (Mao, Castro, Polt-Pot, Santiago Carrillo…) todos ellos son “buenos”en el fantástico imaginario de la extrema izquierda, ahora, un sacerdote que vaya por la calle con sotana o alzacuellos, es un individuo peligroso, un provocador y un “fascista”. Son dos formas muy diferentes de ver y de entender el mundo.
Dejemos por ahora la “interesante” figura del Ché. Ya volveremos en otra ocasión, pues su biografía está salpicada de falsos tópicos y de multitud de detalles que merecen la pena destapar e ir sacando poco a poco.

 

http://lacarlancadelperro.blogspot.com.es/2012/12/che-guevara-homofobo-y-asesino_28.html


Che guevara: de homofóbico a ídolo gay

Ernesto "Che" Guevara se ha convertido en un símbolo revolucionario, para muchos una insignia de la libertad, pero he encontrado algunos documentos que ofrecen otra visión de este hombre, que no es demasiado conocida.


Álvaro Vargas Llosa, The New Republic “La máquina de matar: El Che Guevara, de agitador comunista a marca capitalista.”

Che: ‚“A Guanahacabibes se manda a la gente que no debe ir a la cárcel , la gente que ha cometido faltas a la moral revolucionaria de mayor o menor grado…es trabajo duro, no trabajo bestial‚. “

 

Este campamento fue el precursor del confinamiento sistemático, a partir de 1965 en la provincia de Camagüey, de disidentes, homosexuales, victimas del SIDA, católicos, Testigos de Jehová, sacerdotes afro-cubanos, y otras escorias por el estilo, bajo la bandera de las Unidades Militares de Ayuda a la Producción (UMAP).

Vargas Llosa señaló también que la homofobia ha sido parte del pensamiento de izquierdas, como elemento constitutivo de su cruzada por un "hombre nuevo", libre de las "degeneraciones" pequeño-burguesas.

Fragmento del libro ‚“Exposing the Real Che Guevara: And the Useful Idiots Who Idolize Him":

Página XX: ‚“Cuando Madonna se exhibe sin pudor con una camiseta con la cara del Che ¿no se da cuenta de que está haciendo propaganda a un régimen que criminalizaba la práctica del sexo homosexual y castigaba cualquier cosa que se considerara amaneramiento gay? A mediados de los sesenta el crimen de tener un comportamiento afeminado hizo que miles de jóvenes fueran arrancados de las calles y parques de Cuba por la policí­a secreta y llevados a campos de concentración. En un lema con un paralelismo con el de Auschwitz, entre los encargados de las ametralladoras apostados en las torres de vigilancia se leí­a sobre la puerta en grandes letras: El trabajo os hará hombres`‚.”

Zoé Valdés, escritora de El Mundo apuntó en un artículo:

Al llegar a casa llamé a un amigo homosexual. Me comenta que toda esta «euforia maricona» (palabras suyas, él es cubano) con el Che se desprende de la película de Walter Salles. En el mes de mayo de 2004 se acababa de estrenar en el Festival de Cannes la cinta Diarios de motocicleta, cuyo tema es el viaje y descubrimiento personal del continente latinoamericano por dos jóvenes argentinos montados en una vieja motocicleta, Ernesto Guevara, de 23 años, estudiante de Medicina, y Alberto Granado, de 29 años, bioquímico. Mi amigo me explica que un número importante de homosexuales interpretaron que el Che era loca -no de carroza, de motocicleta- porque lo interpretaba Gael García Bernal, quien al mismo tiempo estrenaba personaje de loca en la película de Pedro Almodóvar La mala educación.

De líder de guerrilla, terrorista, antiderechos humanos, y homofóbico fusilador, a ídolo de la comunidad de homosexuales… qué ironía.

 

http://www.taringa.net/posts/info/4920597/Che-guevara-de-homofobico-a-idolo-gay.html

 


 

Gays Demandarán a Fidel Castro en La Haya

imageEl Grupo Gay da Bahía, Brasil, la más antigua organización de homosexuales de América Latina, se propone demandar al dictador cubano Fidel Castro en el Tribunal Internacional de Justicia de La Haya por "crímenes de lesa humanidad".

Una reciente declaración de Castro al diario mexicano La Jornada, en el sentido de que él era "el responsable" por persecuciones a homosexuales en Cuba durante los últimos 50 años, no han sido suficientes para calmar a este grupo activista. Castro dijo al rotativo que en la época de mayor represión hacia los homosexuales, había estado muy ocupado ante la posibilidad de una invasión norteamericana a Cuba y por atentados en su contra.

El fundador del Grupo Gay da Bahía, el antropólogo Luiz Mott, exige a Castro una disculpa pública como hizo en el pasado el emperador de Japón en relación con la represión de coreanos.

Según el Grupo Gay da Bahía se calcula que más de 10 mil gays y travestis fueron expulsados de Cuba en la primera década de la revolución cubana, y de acuerdo con informes de la Fundación Reinaldo Arenas, entre 2007 y 2008 más de siete mil homosexuales fueron arrestados por la Policía Nacional Revolucionaria de Cuba. El grupo asegura que la conducta del gobierno cubano produjo la "desmoralización, persecución, prisión en campos de concentración con trabajo forzado, tortura, expulsión y muerte de miles de gays, travestis y lesbianas".

Por otra parte, según este grupo, en 2010 más de 700 homosexuales han sido detenidos, de acuerdo con una denuncia del activista cubano Aliomar Janjaque.

La organización defensora del derecho de la comunidad homosexual presentará también una exposición de fotos en Salvador de Bahía, en marzo de 2011, en las que se denuncia la represión a los gays en Cuba.

La página web de Grupo Gay da Bahía señala que la represión a la comunidad gay cubana se recrudeció en 1971 con la "infeliz resolución" del Primer Congreso de Educación y Cultura de Cuba, donde se decreta que "los desvíos homosexuales representan una patología antisocial, no admitiendo de forma alguna sus manifestaciones ni su propagación y estableciendo como medidas preventivas el aislamiento de reconocidos artistas e intelectuales homosexuales y su convivencia con la juventud, e impidiendo a los homosexuales, lesbianas y travestis representar artísticamente a Cuba en festivales en el exterior".

Según esta organización, al tomar el poder en 1959, Fidel Castro dijo que "un homosexual no puede ser un revolucionario". Agrega que en 1965, Castro y el Che Guevara crearon las Unidades Militares de Ayuda a la Producción (UMAP), campamentos de trabajo agrícola de régimen militar "con cercas de alambre de púas de cuatro metros de altura, en los que homosexuales y otros marginales realizaban jornadas de trabajo forzado de 16 horas diarias, en condiciones infrahumanas".

Grupo Gay da Bahía cita también los nombres de importantes escritores cubanos que fueron reprimidos por ser homosexuales, entre ellos Virgilio Piñera, Reinaldo Arenas, José Lezama Lima, Anton Arrufat, Ana María Simo, y señala que inclusive el poeta norteamericano Alen Ginsberg fue expulsado de Cuba, luego de haber sido acusado de divulgar en el extranjero el rumor de que el hermano de Fidel Castro, el general Raúl Castro, actual presidente de los consejos de Estado y de Ministros, era homosexual.

Asimismo, la organización revela que en 1980, el gobierno cubano deportó mediante el éxodo marítimo del puerto de Mariel hacia Estados Unidos a mil 700 personas catalogadas de "homosexuales incorregibles", pero agrega que organizaciones de derechos humanos calculan que esa cantidad podría ser de 10 mil.

Tres películas han reflejado la represión a los homosexuales en Cuba. En la década de los 80, los cineastas exiiados Néstor Almendros, de origen español y ganador de un Oscar, y Orlando Jiménez Leal produjeron en Estados Unidos y Francia el largometraje documental Conducta impropiasobre el tema. En 1994, dentro de Cuba, el director Tomás Gutiérrez Alea realizó la película de ficción Fresa y chocolate. En 2000, el norteamericano Julian Schnabel realizó en Estados Unidos la cinta Before Night Fall (Antes que anochezca), basada en una novela autobiográfica de Reinaldo Arenas, sobre la represión sufrida por él mismo. Arenas, que se suicidó en Nueva York en 1990, fue intepretado por el español Javier Bardem.

http://www.contactomagazine.com/articulos/fidelcastrohomosexuales0910.htm

 



Mapa de la homofobia

Cronología de la represión y censura a los homosexuales por la revolución cubana.
Por Manuel Zayas

Unidades Militares de Ayuda a la Producción, CubaDe un artículo aparecido en el diario cubano El Mundo, el 14 de abril de 1966, sobre las Unidades Militares de Ayuda a la Producción (UMAP), campos de concentración donde fueron confinados homosexuales, testigos de Jehová y disidentes. Jean Paul Sartre dijo: “En Cuba no hay judíos… pero hay homosexuales”. Imagen tomada de El archivo de Connie, donde se puede descargar en PDF.

1961

El Ministerio del Interior ordena redadas policiales contra los homosexuales. Entre las más sonadas, la del 11 de octubre y que se conoció como «la noche de las tres P», contra prostitutas, proxenetas y pederastas (o «pájaros«, como se llama en Cuba a los gays). Entre los tantos detenidos en esta operación policial figura el escritor Virgilio Piñera, quien duerme una noche en los calabozos de la prisión de El Príncipe.

1963

El 13 de marzo, en un discurso en la escalinata de la Universidad de La Habana, Fidel Castro afirma: «Muchos de esos pepillos vagos, hijos de burgueses, andan por ahí con unos pantaloncitos demasiado estrechos; algunos de ellos con una guitarrita en actitudes ‘elvispreslianas’, y que han llevado su libertinaje a extremos de querer ir a algunos sitios de concurrencia pública a organizar susshows feminoides por la libre. (…) La sociedad socialista no puede permitir ese tipo de degeneraciones. (…) Estoy seguro de que independientemente de cualquier teoría y de las investigaciones de la medicina, entiendo que hay mucho de ambiente, mucho de ambiente y de reblandecimiento en ese problema.  Pero todos son parientes: el lumpencito, el vago, el elvispresliano, el ‘pitusa’».

1965

En enero, con motivo del premio Casa de las Américas, el poeta estadounidense Allen Gingsberg visita Cuba. Como disidente de toda ideología, Gingsberg aboga, entre otras cosas, por la legalización de la marihuana, y declara abiertamente su homosexualidad y un especial interés por conocer al «atractivo Che Guevara«. Las autoridades cubanas se escandalizan y lo expulsan en un avión con destino a Praga. Por sus contactos con Gingsberg, el poeta cubano José Mario es arrestado y las Ediciones El Puente, cerradas.

En una entrevista concedida al periodista Lee Lockwood y publicada en el libro Castro’s Cuba, Cuba’s Castro, Fidel Castro dice: «Nunca hemos creído que un homosexual pueda personificar las condiciones y requisitos de conducta que nos permita considerarlo un verdadero revolucionario, un verdadero comunista. Una desviación de esa naturaleza choca con el concepto que tenemos de lo que debe ser un militante comunista (…) Pero sobre todo, no creo que nadie tenga una respuesta definitiva sobre la causa de la homosexualidad. Creo que debemos considerar cuidadosamente este problema. Pero seré sincero y diré que los homosexuales no deben ser permitidos en cargos donde puedan influenciar a los jóvenes».

En su discurso del 19 de abril, Fidel Castro hace una distinción entre quienes pasarán el servicio militar y los que luego serán llamados al ‘ejército del trabajo’. “¿Creyeron, acaso, que en nuestras unidades de artillería o en nuestras unidades de tanques, íbamos a introducir el lumpen? ¿Creyeron, acaso, que en nuestras mejores unidades de combate, con el Servicio Militar Obligatorio (aplausos), íbamos a situar a pepillitos y a lumpencitos? ¡Se equivocaban! Porque hay que decir, hay que decir que en el Servicio Militar obligatorio los primeros que fueron llamados fueron los jóvenes revolucionarios, los jóvenes más revolucionarios (aplausos)”.

El 31 de mayo, la revista Mella, de la Unión de Jóvenes Comunistas, insta a la expulsión de los homosexuales de la enseñanza secundaria superior. Dice el texto: “Estos elementos, contrarrevolucionarios y homosexuales, es necesario expulsarlos de los planteles en el último año de su carrera en la enseñanza secundaria superior, para impedir su ingreso en las Universidades. Para ellos solamente hay dos alternativas dentro de nuestra sociedad: o convertirse en elementos deleznables, o pasar a formar parte de las filas del ejército del trabajo (…) ¡Fuera los contrarrevolucionarios y los homosexuales de nuestros planteles!”.

El 19 de noviembre se crean las Unidades Militares de Ayuda a la Producción (UMAP), donde son confinados unos 25.000 hombres, básicamente jóvenes en edad militar, entre los cuales hay religiosos, homosexuales y disidentes, a los que se cataloga como parásitos, vagos y antisociales.

Durante una acción policial a gran escala por todo el país, miles de jóvenes son arrestados en sus casas y llevados por la fuerza en trenes, camiones y autobuses hasta la provincia de Camagüey, donde son concentrados en diversos estadios deportivos. Luego se les traslada hacia zonas agrícolas, para realizar trabajo forzado, sobre todo en el corte de caña. Se albergan en barracas insalubres, ubicadas en campamentos cercados con alambre de púas, que son custodiados por efectivos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR).

Entre los militares responsables de esos campos de concentración están los nombres de José Ramón Silva, Rogelio Acevedo, Víctor Drake, René de los Santos, Ramón Pardo Guerra, Israel Pardo Guerra, Quintín Pino Machado, Reinaldo Mora Pérez, Carlos Cabale Araujo y Felipe S. Guerra Matos.

1966

En marzo, un alto jefe de las UMAP, asegura que los integrantes de estas unidades «son militares y no presos políticos, como se ha querido pretender».

El 13 de marzo, Fidel Castro amenaza con redadas, inquisición, y anuncia que se acabará con el pecado y el vicio dentro de la revolución. Todas estas medidas él las definió así: “Ha sido necesaria esta amarga experiencia”.

Fragmentos de su discurso:

“No vamos a fusilar a esa gente, no; en otros sitios los han fusilado, pero de verdad que lo que debemos es fusilar el vicio, porque en eso hay muchas responsabilidades. Todos tenemos responsabilidades, ¡todos! Tomar conciencia de esos vicios y erradicarlos es lo que corresponde hacer, y algunos pepillitos de estos mandarlos al Servicio Militar Obligatorio (aplausos), o mandarlos a la agricultura, sean quienes sean y llámense como se llamen. (Aplausos.) ¿Privilegios en el seno de la Revolución? (Exclamaciones de: ‘¡No!’); ¿derechos feudales en el seno de esta Revolución? (Exclamaciones de: ‘¡No!’); ¿apellidos en el seno de esta Revolución? (Exclamaciones de: ‘¡No!’) Pues bien, luchemos contra eso y habremos sacado el más saludable fruto de esta experiencia amarga.”

“Tenemos a unos cuantos señores arrestados. No les va a pasar nada, nadie se asuste; simplemente estamos investigando algunas irregularidades, algunas inmoralidades, algunas faltas que están sancionadas por el Código Penal. ¿Viciosos en el seno de la Revolución? ¡No! Porque, en todo caso, lo mandamos a un hospital para que lo curen; si está loco, a un manicomio, pero que no estorben. Hay mucho que hacer, hay mucho que trabajar.”

“¿Guapos por la calle? ¡No! Si son guapos haremos boxeadores con ellos, o algo por el estilo, a ver si, no sé.”

“Y les advierto que esta es la atmósfera capitalina, estos vicios son capitalinos. Una ciudad grande tiene las características de una ciudad grande.Estos vicios no son propios de las capitales de provincias, son propios de nuestra capital. ¿Qué lo ha alentado? Cierta impunidad, cierto historial de quienes han sido genuinos representantes de esos vicios.”

“Y ha llegado la hora —como decía—, sin matar un mosquito, de ponerle fin a todo esto. Y, desde luego, le pondremos fin sin violencia. Habrá que, desde luego, en algunos casos interrogarlos, hacer investigaciones, hacer ciertas inquisiciones, y las estamos haciendo.”

Raúl Castro, ministro de las FAR, declara en abril que en el «primer grupo de compañeros que han ido a formar parte de las UMAP se incluyeron algunos jóvenes que no habían tenido la mejor conducta ante la vida, jóvenes que por la mala formación e influencia del medio habían tomado una senda equivocada ante la sociedad y han sido incorporados con el fin de ayudarlos para que puedan encontrar un camino acertado que les permita incorporarse a la sociedad plenamente».

En una información publicada el 14 de abril en el diario Granma se afirma: “Cuando comenzaron a llegar los primeros grupos que no eran nada buenos, algunos oficiales no tuvieron la paciencia necesaria ni la experiencia requerida y perdieron los estribos. Por esos motivos fueron sometidos a Consejo de Guerra, en algunos casos se les degradó y en otros se les expulsó de las Fuerzas Armadas”.

El 9 de diciembre, el escritor inglés Graham Greene publica en el Daily Telegraph Magazine un artículo titulado ‘Shadow and Sunlight in Cuba’ [Luces y sombras en Cuba]. Greene alerta de la existencia de campos de trabajo forzado: “(…) existe una oscura sombra que resulta mucho peor que el bloqueo, el racionamiento o las incursiones aéreas: las UMAP, una palabra que parece extraída de la ciencia ficción (como si la humanidad de algún modo estuviera enterrada en ella). Las siglas significan Unidad Militar de Ayuda a la Producción, pero representan los campos de trabajo forzosos que controla el ejército. En teoría, no pasa nada erróneo en ellos: un hombre que no es capaz de prestar servicio militar pasa tres años trabajando la tierra, pero la práctica difiere de la teoría, ya que no existen los permisos ni las visitas de la familia. (Incluso el contrarrevolucionario recluido en la sombría prisión de Isla de Pinos, construida por Batista, tiene derecho a una visita mensual.)”

Las autoridades sacan de circulación la novela Paradiso, de José Lezama Lima.

1968

Ante las protestas de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), de organismos internacionales y también de intelectuales extranjeros de renombre, son cerradas las UMAP. Según los ex confinados —que actualmente tienen una asociación de igual nombre en Miami—, allí ocurrió de todo: juicios sumarios, automutilaciones, suicidios y todo tipo de abusos por parte de los guardias. Se dice que la documentación sobre esos campos de concentración fue destruida.

Paralalemente a la creación de las UMAP en 1965, se establecieron campos de trabajo forzado en la agricultura, en régimen paramilitar, a los cuales serían enviadas las personas que manifestaban su deseo de emigrar. El trabajo agrícola era condición para otorgar el permiso de salida, y muchos de los que intentaron evadir esos trabajos eran condenados a prisión.

Ya en 1968, en plena Ofensiva Revolucionaria, el gobierno bautizó los campos de trabajo forzado con un nuevo nombre. Los llamó Campamentos de Apátridas y los mantendría en vigor hasta mediados de los 70. Decenas de miles de cubanos pasaron por esa suerte de gulag castrista, básicamente hombres que sobrepasaban la edad del servicio militar obligatorio. A los varones entre 15 y 26 años no se les permitía emigrar. Por lo general, las mujeres sin hijos menores de 7 años eran enviadas a granjas avícolas en un régimen menos severo.

El departamento de orden público de esos campos llevaba un estricto control de cada ciudadano, y vigilaba con especial interés “los casos de homosexualidad”, según el Reglamento para Campamentos de Apátridas reproducido en el libro Diario para Uchiram, de la escritora Julia Miranda (Verbum, Madrid, 2008).

El poeta Delfín Prats recibe el premio David de la UNEAC por su poemario Lenguaje de mudos. Por su marcado carácter homosexual, el libro no sale a la venta: será convertido en pulpa.

Aparece en Francia la novela El mundo alucinante (Éditions du Seuil), de Reinaldo Arenas. El libro ganó una mención en el premio Casa de las Américas, pero no fue publicado en la Isla debido a la negativa de su autor de suprimir referencia alguna a la homosexualidad.

El 28 de septiembre, en un discurso en la Plaza de la Revolución, Fidel Castro dice: «En nuestra capital, en los últimos meses, le dio por presentarse un cierto fenomenito extraño, entre grupos de jovenzuelos, y algunos no tan jovenzuelos (…) que les dio por comenzar a hacer pública ostentación de sus desvergüenzas. Así, por ejemplo, les dio por comenzar a vivir de una manera extravagante, reunirse en determinadas calles de la ciudad, en la zona de la Rampa, frente al hotel Capri…». Estas palabras son caldo de cultivo de las continuas redadas contra hippies, melenudos, prostitutas y homosexuales. Las imágenes de archivo de este discurso son visibles en mi documental Seres extravagantes (2004).

1969

Abel Prieto Morales (padre del actual ministro de Cultura) publica en el número 113 de la revista Bohemia el artículo «La homosexualidad», en el que refiere: «los adultos homosexuales son numerosos, y están en todos los medios y en todas las profesiones; muchos son a la vez heterosexuales y homosexuales. El hecho no se reduce a reconocerlos ni a desconocerlos, sino a evitar que sean factores de contagio. Para ello, lo recomendable es, básicamente, procurar que no sean conductores de juventudes y tengan el menor contacto posible con la niñez que surge».

1970

Homosexuales cubanos dirigen una carta al movimiento de liberación gay en Estados Unidosdenunciando la represión homófoba en la Isla.

1971

El 16 de marzo entra en vigor la Ley 1231, sobre la vagancia como índice de peligrosidad y como delito, que induce a la obligatoriedad del trabajo para la población masculina y establece que la desvinculación laboral es un estado pre-delictivo. Esta ley fue derogada con su incorporación al Código Penal de 1979, que cataloga la vagancia como «estado peligroso».

Del 24 al 28 de abril se celebra en La Habana el I Congreso de Educación y Cultura. Las autoridades competentes concluyen que «no es permisible que por medio de la calidad artística reconocidos homosexuales ganen influencias que incidan en la formación de nuestra juventud (…) Se sugirió el estudio para la aplicación de las medidas que permitan la ubicación en otros organismos de aquellos que, siendo homosexuales, no deben tener relación directa en la formación de nuestra juventud desde una actividad artística o cultural…».

«Se debe evitar que ostenten una representación artística de nuestro país en el extranjero personas cuya moral no responda al prestigio de nuestra revolución. Solicitar penas severas para casos de corruptores de menores, depravados reincidentes y elementos antisociales irreductibles».

El Comandante en Jefe y primer ministro Fidel Castro asiste a algunas de las sesiones en el Congreso y José Ramón Fernández, ministro de Educación, comparece en la televisión y explica las posiciones tomadas.

Se producen despidos de artistas e intelectuales «de vida amoral, extravagante o escandalosa«. De semejantes despidos se salvan el Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC), Casa de las Américas y el Ballet Nacional de Cuba, bajo el amparo ofrecido por la dirección de Alfredo Guevara, Haydée Santamaría y Alicia Alonso, respectivamente.

1973

Se sanciona la Ley 1249, que modifica el Código de Defensa Social de 1938, y se criminaliza «la ostentación pública de la homosexualidad» con penas de tres a nueve años de prisión. Esta ley fue derogada en 1979, con la entrada en vigor del nuevo Código Penal, que siguió castigando a los homosexuales.

1974

En marzo, se aprueba la Ley 1267, que modifica la Ley 1166, de Justicia Laboral, a la que se agrega el inciso J, relativo a «El homosexualismo ostensible y otras conductas socialmente reprobables que proyectándose públicamente, incidan nocivamente en la educación, conciencia y sentimientos públicos y en especial de la niñez y la juventud por parte de quienes desarrollen actividades culturales o artístico-recreativas desde centros de exhibición o difusión». La Ley 1267 lleva la rúbrica del presidente Osvaldo Dorticós y del primer ministro, Fidel Castro.

1975

El Tribunal Supremo invalida la Resolución número 3 del Consejo de Cultura, por la que se acordaron los parámetros que limitaban el empleo a los homosexuales en el arte y la educación. Se restituyen los empleos a los artistas e intelectuales cesantes por aquella resolución.

1979

Entra en vigor un nuevo Código Penal, que, en su artículo 359, bajo la figura de «Escándalo público», dice: «Se sanciona con privación de libertad de tres meses a nueve meses o multa hasta doscientas sesenta cuotas o ambas al que: a) haga pública ostentación de su condición de homosexual o importune o solicite con sus requerimientos a otro; b) realice actos homosexuales en sitio público o en sitio privado pero expuestos a ser vistos involuntariamente por otras personas; c) ofenda el pudor o las buenas costumbres con exhibiciones impúdicas o cualquier otro acto de escándalo público; ch) atisbe hacia el interior de las viviendas por los huecos de las cerraduras, ventanas, postigos, lucetas o rendijas, o de cualquier otro modo; d) produzca o ponga en circulación publicaciones, grabados, cintas cinematográficas o magnetofónicas, grabaciones, fotografías, u otros objetos obscenos, tendentes a pervertir y degradar las costumbres».

Además, este Código Penal establece en sus artículos 77 y 78 los índices de peligrosidad; y fija sanciones como «medidas de seguridad predelictivas» y «postdelictivas» .

1980

Entre abril y septiembre, durante el éxodo del Mariel, alrededor de 125.000 cubanos abandonan la Isla con dirección a Estados Unidos. El gobierno cubano deporta a enfermos mentales y presos comunes. Alentados por las autoridades de la Isla, se realizan actos de repudio en contra de los que se quieren ir. Los homosexuales, catalogados como antisociales, son incluidos en la nómina de «indeseables, apátridas y lumpens».

1984

El 12 de septiembre se estrena en el Festival Internacional de Cine de Toronto, el documentalConducta impropia, de Néstor Almendros y Orlando Jiménez Leal. El filme examina las persecuciones sufridas por los homosexuales y artistas cubanos. Se incluyen entrevistas a José Mario, Martha Frayde, René Ariza, Reinaldo Arenas, Guillermo Cabrera Infante, Juan Goytisolo, Susan Sontag, Ana María Simo y Heberto Padilla, entre otros. El guión del documental así como los testimonios descartados en el montaje final de la película aparecen publicados en una edición homónima (Editorial Playor, 1984; Editorial Egales, 2008, con DVD).

1986

En abril se inaugura el Sanatorio de Santiago de las Vegas, en las afueras de La Habana, el primer sidatorio creado por las autoridades de salud pública donde, en régimen de reclusión obligatoria, se atiende a los seropositivos y enfermos de Sida.

Se imponen test analíticos a las personas que integran los grupos de riesgo, sobre todo a quienes ejercen la prostitución con extranjeros, «como medida para evitar el contagio de la población». No se ofrecen garantías de confidencialidad sobre los resultados de los análisis de sangre.

Los seropositivos pierden el derecho al trabajo, aunque reciben una pensión. Para salir del sanatorio, en régimen de visita a familiares o por otras razones, deben solicitar un permiso especial. El gobierno no ofrece cifras de los casos de «internacionalistas» y ex combatientes de la guerra de Angola seropositivos. Tal régimen de reclusión obligatoria sería condenado por varios organismos internacionales de derechos humanos.

1987

El 24 de junio, en un discurso transmitido por televisión desde el Consejo de Estado, Fidel Castro aborda la deserción del General Rafael del Pino. Castro hace alusión a la homosexualidad de uno de los hijos del General. El texto no es accesible desde el portal gubernamental que contiene sus discursos. [Versión en inglés del fragmento donde Castro habla del hijo de Rafael del Pino: “Questioning of Orestes Perez Gil indicated that on 12 or 13 May, Ramses, the homosexual son of the traitor, of whom Orestes Perez Gil was a close friend, shared his treason plans with Perez.”]

1988

El 30 de abril entra en vigor la Ley 62, por la que se aprueba un nuevo Código Penal que, en su artículo 303, titulado «Escándalo público«, expresa: «Se sanciona con privación de libertad de tres meses a un año o multa de cien a trescientas cuotas al que: a) importune a otro con requerimientos homosexuales; b) ofenda el pudor o las buenas costumbres con exhibiciones impúdicas o cualquier otro acto de escándalo público; c) produzca o ponga en circulación publicaciones, grabados, cintas cinematográficas o magnetofónicas, grabaciones, fotografías u otros objetos que resulten obscenos, tendentes a pervertir y degradar las costumbres».

Según disposiciones complementarias, a los maestros o encargados en cualquier forma de dirección de la juventud que sean declarados culpables de violar, entre otros, dicho artículo «se les impone la sanción accesoria de prohibición permanente para el ejercicio del magisterio o de cualquier otra función de dirección de la juventud».

Se realiza la primera operación de cambio de sexo en Cuba, de un hombre que pasa ser mujer. El caso se presenta en un congreso de Urología en el Palacio de las Convenciones de La Habana.

1991

La revista Unión, en su número 12, publica el cuento El lobo, el bosque y el hombre nuevo, de Senel Paz, que había ganado en 1990 el premio de cuentos Juan Rulfo, convocado por Radio Francia Internacional.

1992

En declaraciones al periodista Tomás Borge, recogidas en el libro Un grano de maíz, Fidel Castro da señales de amnesia histórica: «No voy a negar que, en cierto momento, esta cosa machista influyó también en un enfoque que se tenía hacia el homosexualismo. Yo personalmente —tú me estás preguntando mi opinión personal—, no sufro de este tipo de fobia contra los homosexuales. Realmente, en mi mente, esto nunca ha estado y jamás he sido partidario, ni he promovido, ni he apoyado políticas contra los homosexuales. Eso correspondió, yo diría, a una etapa determinada y está asociado mucho con esa herencia, con esa cosa del machismo. Trato de tener un argumento más humano y más científico del problema. Esto muchas veces se convierte en tragedia, porque hay que ver cómo piensan los padres; incluso hay padres que tienen un hijo homosexual y eso se convierte para ellos en tragedia, y uno no puede sentir sino pena porque una situación de ésas ocurra y se convierta también en una tragedia para el individuo».

1993

En diciembre, el Festival del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana estrena con gran éxito de público el largometraje de ficción Fresa y Chocolate, de Tomás Gutiérrez Alea y Juan Carlos Tabío. La cinta arrasa con los premios de la cita habanera, y también en los festivales de Berlín y Gramado. Obtiene el Goya a la mejor película extranjera, en España, y una nominación a la mejor película extranjera de la Academia Cinematográfica de Hollywood.

«Fidel con este filme, asumido, y sin nada decir cerramos internacionalmente ese horrible momento que algunos llaman Capítulo y que prefiero llamar ‘inciso’, que fue la UMAP», escribió Alfredo Guevara, presidente del Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos, en carta a Fidel Castro, fechada el 23 de noviembre de 1993.

Se exhibe una retrospectiva de las películas de Pedro Almodóvar en el Festival de Cine de La Habana.

1994

Durante varios meses, se mantiene en cartelera Fresa y chocolate (no fue exhibida por la televisión cubana hasta 2007). La película se convierte en un fenómeno social. Se abren ciertos espacios de tolerancia en discotecas oficiales habaneras (Eco disco, Disc Joker, etcétera) y las ilegales fiestas de «10 pesos» cobran popularidad entre gays y lesbianas. A finales de la década, estos espacios irán mermando ante el incremento del acoso policial.

El 28 de julio, 13 hombres y 5 mujeres crean —sin apoyo oficial— la Asociación Cubana de Gays y Lesbianas. No hay reacción gubernamental.

Aparece la primera edición cubana de la novela Hombres sin mujer, de Carlos Montenegro (Editorial Letras Cubanas), publicada en México en 1938 (Editorial Masas). Esta edición es una clara señal de que la homosexualidad ha dejado de ser un «tema prohibido» en la política editorial del Ministerio de Cultura, que ya desde fines de los años ochenta había autorizado publicaciones con contenido homosexual.

1995

El 14 de noviembre, Manuel Hernández, jefe de la campaña nacional contra el sida, anuncia que el 10 por ciento de los 1.180 seropositivos en régimen de «cuarentena obligatoria» volverán a desarrollar una vida normal. Antes de pasar al «régimen ambulatorio», los seropositivos deben asegurar que asumirán «actitudes responsables». A partir de entonces, la reclusión en los sanatorios de Sida deja de ser obligatoria. Se reconoce el derecho de los seropositivos al empleo.

Se proyecta una retrospectiva de Pier Paolo Pasolini en el Festival de Cine de La Habana.

1996

Se publica Machos, maricones and gays: Cuba and homosexuality, de Ian Lumsden (Editorial Temple University Press, Estados Unidos), que analiza la homosexualidad en Cuba. En el apéndice del libro aparecen textos de Tomás Fernández Robaina, de Pablo Milanés, y un manifiesto de la Asociación Cubana de Gays y Lesbianas.

1997

La Asociación Internacional de Gays y Lesbianas (ILGA, siglas en inglés) denuncia que la supresión de la Asociación Cubana de Gays y Lesbianas, luego del acoso sufrido por sus miembros, demuestra la falta de libertad de asociación en la Isla.

El Decreto-Ley 175, del 17 de junio, modifica el artículo 303 del Código Penal de 1987 en título y concepto, y se elimina la referencia a la homosexualidad.

El 24 de agosto, la policía cubana realiza una redada de grandes proporciones contra los gays que participan en la fiesta de El Periquitón. Entre los presentes, el cineasta español Pedro Almodóvar, la transexual Bibi Andersen y el modisto francés Jean Paul Gaultier.

La acción policial se salda con cientos de detenidos, que son llevados a estaciones de policía y liberados al día siguiente. Se les impone una multa de 30 pesos. Los organizadores de la fiesta son trasladados a la prisión de 100 y Aldabó, en La Habana, donde permanecen varios meses.

2001

En febrero, un editorial del semanario oficialista Tribuna de La Habana, firmado por su director, Ángel Rodríguez Álvarez, arremete contra los gays y los travestis que se reúnen en el malecón habanero, frente a la cafetería FIAT. El periodista considera que se debe negar el espacio público a personas que califica de «prostitutas, proxenetas y estrafalarios». Sobre los travestis, dice que son una «figura desdichadamente extendida por el mundo, pero casi desconocida en Cuba». Bajo el amparo de tales declaraciones, se efectúan redadas policiales.

El Ministerio de Cultura y el Comité Central del Partido Comunista convocan a una reunión con los periodistas culturales para abordar «el daño inmenso que está haciendo a la revolución» la difusión internacional de la película Antes que anochezca, de Julian Schnabel, basada en la autobiografía de Reinaldo Arenas.

Presiden la reunión el ministro de Cultura, Abel Prieto, Pedro de la Hoz, periodista y asesor del ministro, y Alfonso Borges, jefe del Departamento Ideológico del Comité Central.

Como consecuencia, el primer número de la revista digital La Jiribilla, que aparece en mayo, es dedicado a Arenas. Se publica La política sexual de Reinaldo Arenas (realidad, ficción y el archivo real de la revolución cubana), del sindicalista estadounidense Jon Hillson.

El libelo de Hillson minimiza el impacto de las UMAP al calor del acoso imperialista que ha sufrido la revolución cubana, y afirma que la homosexualidad fue despenalizada en Cuba en 1979, con el nuevo Código Penal (falsedad que ha sido repetida por los voceros oficiales y medios de prensa); mientras añade que «en 1987, una nueva orden policial prohibió el acoso de personas debido a su apariencia o manera de vestir, lo cual se hacía amparándose en estatutos en contra de la conducta ostentosa».

Violando los derechos de copyright y la voluntad del autor expresada en su testamento, La Jiribilla publica los relatos Adiós a Manhattan y El cometa Halley, de Arenas.

Se edita Gay Cuban Nation, del profesor cubanoamericano Emilio Bejel (Editorial University of Chicago Press, Estados Unidos), el mayor estudio del homoerotismo y la homofobia en la literatura, el cine y la sociedad cubanos.

2003

Fidel Castro insulta a dos locutores de Miami que le hacen una broma telefónica haciéndose pasar por Hugo Chávez, con gritos de «¿En qué caí, comemierda? ¿En qué caí, maricón? ¿En qué caí, mariconzón?». Asociaciones de gays y lesbianas publican comunicados de condena a la homofobia evidente del gobernante cubano.

2004

En julio, en un reporte del corresponsal de la BBC en La Habana, una funcionaria del gobierno cubano asegura que la Policía Nacional Revolucionaria «no reprime a los homosexuales, sino las conductas negativas que ellos tienen». «Algunos de los travestis presos son personas que tenían otras causas pendientes», dice María Rodríguez, psicóloga del Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX).

En septiembre, la revista Alma Mater, de casi nula circulación en la Isla y destinada a los estudiantes universitarios, publica un dossier sobre la homosexualidad en Cuba, un tema ignorado por los restantes medios de comunicación cubanos. En una entrevista a Mariela Castro Espín, directora del CENESEX, y titulada «Más relajados, no más tolerantes», ésta aboga por una enmienda en la constitución cubana para que en la Isla sea explícitamente ilegal discriminar a los homosexuales.

2005

El 9 de mayo, la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional denuncia que, de enero a mayo, se han realizado redadas policiales y detenciones de alrededor de 400 jóvenes, la mayoría residentes en la capital, a los cuales se les aplica la figura de «peligrosidad pre-delictiva», presente en el Código Penal. Entre los detenidos había jóvenes que se supuestamente se dedicaban a la prostitución homosexual.

El CENESEX y el Ministerio de Salud Pública patrocinan en agosto un festival de cine gay en La Habana. La noticia no circula en los medios de prensa cubanos, excepto en ciertas páginas en Internet, al que no tienen acceso los cubanos de la Isla.

En diciembre, se inaugura una exposición del fallecido fotógrafo estadounidense Robert Mapplethorpe, icono homosexual. Asiste Ricardo Alarcón, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular.

Durante ese mes, el CENESEX, que dirige Mariela Castro Espín, presenta una iniciativa parlamentaria que permita legalizar el cambio de sexo. Silencio total en la prensa cubana.

Retrospectiva de Pier Paolo Pasolini en el Festival de La Habana. Entre sus títulos se incluye Saló o los 120 días de Sodoma.

2007

El 17 de mayo se celebra por primera vez en Cuba el Día Mundial Contra la Homofobia.

2008

En mayo la televisión cubana emite el filme Brokeback Mountain, de Ang Lee. Palabra Nueva, la revista de la Arquidiócesis de La Habana, pone el grito en el cielo ante la normalización del «homosexualismo» en la isla. Orlando Márquez firma el artículo «Llegamos o nos pasamos», en el que asegura que tal normalización y la adopción de leyes en ese sentido constituyen mensajes que “hacen peligrar la inocencia de los más pequeños”.

En junio, el CENESEX anuncia que el Ministerio de Salud Pública ha emitido una resolución mediante la cual se aprueban las operaciones de cambio de sexo en la isla.

2010

El 31 de agosto, el periódico mexicano La Jornada publica una entrevista a Fidel Castro con el titular: «Soy el responsable de la persecución a homosexuales que hubo en Cuba».

Versión ampliada y corregida por su autor del texto de igual nombre publicado el 20 de enero de 2006 en el sitio digital Cubaencuentro.com.

 

https://manuelzayas.wordpress.com/mapa-de-la-homofobia/



La Homofobia Castrista y la Homosexualidad en Cuba

Escritor Virgilio Piñera: Che Guevara visitaba una Embajada cubana en Europa cuando vio, abierto sobre la mesa del señor Embajador, un libro de uno de los escritores cubanos más grandes de todos los tiempos, Virgilio Piñera, pero homosexual. El comandante argentino agarró presto el libro de Piñera y, dirigiéndose al Embajador, le preguntó "¿Qué haces leyendo un libro de este maricón en nuestra Embajada? Y, sin esperar respuesta, lo cerró y lo tiró al latón de la basura.

Ana Belén Martín Sevillano

Cuenta Guillermo Cabrera Infante en esa colección de exorcismos que es Mea Cuba cómo la muerte y funeral de Virgilio Piñera se convirtieron en una "pieza del absurdo" que esta vez no le había tocado escribir sino protagonizar.

El cadáver del escritor aparecía y desaparecía en un frenético intento por parte de las instituciones gubernamentales de que no se le llorara como merecía, es decir, rodeado de flores y plumas.

Se le lloró, no sólo porque lo mereciera, sino porque había muerto "el único y auténtico escritor popular que quedaba en Cuba", a pesar de que casi nadie pudiera asistir a su entierro y de que no apareciera ninguna nota necrológica en los periódicos latinoamericanos.

El acoso y la persecución que conformaron la vida de Piñera durante el periodo férreo y estalinista de la década del setenta encierran una problemática sobre la cual me gustaría reflexionar aquí.

Los primeros pasos de la Revolución Cubana como régimen político instituido, a partir de enero de 1959, van acompañados del periódico Revolución, dirigido por Carlos Franqui, y del suplemento de cultura Lunes de Revolución que desde septiembre del mismo año estará en manos de Cabrera Infante.

En el Suplemento Lunes de Revolución que desde septiembre del 1959 estará en manos de Cabrera Infante.

En sus páginas se podían leer con frecuencia textos de relevantes intelectuales del ámbito internacional: Asturias, Carpentier, Antón Arrufat, Borges, Calvert Casey, Carlos Fuentes, Graham Greene, Lezama Lima, Vladimir Nabokov, Picasso, Sartre, Severo Sarduy, entre otros, y, por supuesto, Cabrera y Piñera. La actitud y militancia sexual de Virgilio y los prejuicios que por ese motivo surgían en torno a él y a su literatura "obligaron" a que sus trabajos aparecieran bajo el seudónimo de El Escriba.

No obstante, la participación del escritor en la reforma cultural y educacional que se pretendía llevar a cabo tras el triunfo de Fidel Castro era total y convencida. De hecho, en junio de 1959, aparecen dos artículos suyos en el periódico antes mencionado. El primero, bajo el epígrafe de "La reforma literaria", expone que la labor de cambio en el campo de la creación y organización literaria debía de estar en manos de los jóvenes. Según él, la concesión de becas, la creación de una imprenta nacional o la designación de un director de cultura no significaban de ninguna manera reformar la literatura.

Considera que el camino de la literatura cubana no pasa por encuadrarse en el paradigma de lo nacional, sino por una toma de conciencia personal del escritor que, como tal, ha de entenderse a sí mismo, rechazando los lugares comunes. En el segundo, titulado "…Literatura y Revolución " se pronuncia contra la literatura dirigida o al servicio de la política y, al tiempo, deslinda lo que significa servir a la Revolución de lo que supone el ejercicio de la creación literaria.

Antes de 1959 Virgilio visito en varias ocasiones Argentina, Francia, Belgica.

En enero de 1960 vuelve sobre el tema en "Pasado y presente de nuestra cultura", insistiendo en la idea de que la nueva situación política y social ofrecía la posibilidad de un cambio total en la posición del artista, bajo el supuesto del cuestionamiento de la actividad creadora con respecto al pasado de la Isla. Incita a los jóvenes a la ira como parte integrante del proceso revolucionario y apoya la crítica de las instituciones culturales consolidadas (en este sentido consiente el ataque a Lezama que venía protagonizando por esa época Heberto Padilla, pues lo interpreta, en ese momento, como parte del proceso de derribo de los iconos clásicos de la literatura cubana).

A partir de 1961 la situación inicia un proceso de cambio que irá conformando un campo artístico sometido a los designios políticos. De esta manera el campo artístico devendrá en un espacio regulado por un principio heterónomo , lo que supone una contradicción, pues desde las Vanguardias se le supone autónomo.

Es en este momento cuando se prohibe la venta de libros considerados contrarrevolucionarios y cuando, en principio a petición de los intelectuales e incluso desde las páginas de Lunes de Revolución, se gesta el Primer Congreso Nacional de Escritores y Artistas. Sucedió, sin embargo, que por esos días se secuestra un corto cinematográfico realizado por Sabá Cabrera Infante y Orlando Jiménez que iba a ser emitido en el programa televisivo de Lunes de Revolución. La protesta del magazine, avalada por los escritores y artistas, no se hizo esperar. En esa coyuntura se celebra en junio (los viernes 16, 23 y 30) una serie de reuniones en la Biblioteca Nacional que enmarcan el Congreso de Escritores y Artistas. Es ahí cuando Fidel Castro pronunció sus "Palabras a los intelectuales" que articuló en los primeros momentos del discurso al emitir que " …dentro de la Revolución, todo; contra la Revolución, nada. Contra la Revolución nada, porque la Revolución tiene también sus derechos y el primer derecho de la Revolución es el derecho a existir y frente al derecho de la Revolución de ser y de existir, nadie".

Significativa fue la intervención brevísima que Virgilio Piñera llevó a cabo: "Yo quiero decir que tengo mucho miedo. No sé por qué tengo ese miedo pero es eso todo lo que tengo que decir". Años después, Reinaldo Arenas, dentro de su novela El portero, hará que en una asamblea esópica el conejo inicie su discurso de la siguiente manera:

"Yo tengo miedo, mucho miedo, muchísimo miedo. En realidad creo que me muero de miedo. Sí, casi muerto estoy. Pero también estoy seguro de que si no fuera por el miedo no estaría casi muerto, sino completamente muerto. Es decir, me hubiera matado yo mismo, porque el miedo es lo único que nos mantiene vivos …".

En el posterior acontecer de la historia cubana se suceden las represiones y las censuras; por supuesto Lunes de Revolución desaparece, pero uno de los hechos más dramáticos tendrá lugar en el otoño de ese mismo año. El once de octubre, viernes de nuevo, se desarrolla una redada del Ministerio del Interior con el objeto de apresar a pederastas, prostitutas y proxenetas, será la Noche de las Tres Pes. A pesar de que la acción se dirigía en el centro de la Habana Vieja, Virgilio fue hecho prisionero a la mañana siguiente en su casa de Guanabo, a treinta kilómetros, y conducido a prisión. A su salida, encuentra la casa precintada.

Estos serían los rasgos que nos conducen, desde la experiencia de Virgilio Piñera, a la estructuración del campo artístico y literario en la Cuba revolucionaria. Cuando en principio debiera ser éste un campo autónomo (siempre relativamente) se configura como un campo donde inciden otros, especialmente el ideológico, acatando el principio de ideología única. El discurso ideológico revolucionario, amparado en los principios de independencia, nación y unidad, despliega la cara más terrible de su estructura en los años setenta pues entiende que cualquier posición "juzgada" como ajena a esos principios se integra en el terreno del enemigo.

La reflexión sociológica de la Isla giró en torno a la identidad del cubano y del "hombre nuevo" como paradigma del sujeto revolucionario. Fueron muchos los ingredientes de este particular humanismo caribeño. Dado el carácter antiburgués del sistema, los valores propiciados fueron los que supuestamente pertenecían al pueblo, aunque en muchos sentidos parece haber habido una confusión entre lo propio del pueblo y lo vulgar. La cortesía y la educación ciudadana se han considerado en ocasiones parte del acerbo de la burguesía vencida, amaneramientos propios del régimen enemigo. Testimonio irónico de este aspecto fue la magistral película de Tomás Gutiérrez Alea Memorias del subdesarrollo (1968), cuyo protagonista, precisamente un burgués vencido, da cuenta de este fenómeno. No es casualtampoco que este film recoja imágenes de archivo pertenecientes a la invasión de Bahía de Cochinos o al discurso "Palabras a los intelectuales" ya antes aludido.

Dentro de ese nuevo catálogo de principios que arroja la Revolución se asumía la homosexualidad como un rasgo característico de la decadencia burguesa, opuesto a la "natural y sana" heterosexualidad del pueblo. No obstante, es quizás necesario apuntar que la homofobía es un aspecto significativo de la cultura cubana, que fue reforzado y potenciado por el credo revolucionario y se constituyó como un bastión de la idiosincrasia cubana. Tras esto, sólo al ser abordado con acierto en los años noventa con Fresa y chocolate (1993), primer film cubano de proyección y comercialización internacional, donde se trata el asunto desde una posición legitimada dentro del campo artístico cubano. Así pues, es sobre esta base, sobre este estado de opinión del pueblo legitimado por el poder, que la seguridad política del estado cubano se hizo con un arma que pudiera arrojar sobre cualquier individuo que la mereciera y que contaba con el respaldo de toda una sociedad, ya que se había asentado como valor de uso.

La cuestión que subyace es hasta qué punto importaba al gobierno de la Isla la homosexualidad de muchos de los perseguidos y presos, más allá de ser considerada como una degeneración erradicable de la nueva y pura sociedad revolucionaria. El hecho es que el arma se arrojó, en la mayoría de los casos, cuando existía un motivo político que la precisaba, y solapaba así algo bastante difuso en cuanto a su fijabilidad como es la conciencia política y ética de los individuos. La siempre precisa y certera mirada de Susan Sontag atisbó que la militarización de los regímenes comunistas (opuesta al credo de la izquierda tradicional) hacía del homosexual un sujeto subversivo en la medida que no cumplía, en términos generales, la "masculina" agresividad que el sistema imponía. Subrayaba también la pensadora norteamericana que uno de los puntos débiles de la izquierda era el asunto de las identidades sexuales que precisaba ser abordado sin demora (9). Si Virgilio Piñera fue detenido y apresado, al incluírsele en la nómina de la pederastia, era porque su nombre figuraba en una lista no escrita de temperamentos indóciles que difícilmente se ajustarían a los nuevos parámetros que oficializaba el discurso ideológico.

De hecho el director del I.C.A.I.C. (Instituto Cubano de Cine), Alfredo Guevara, comunista ortodoxo, ha hecho siempre ostentación de su condición homosexual. Fue él quien censuró P.M., el corto de Sabá Cabrera y O. Jiménez, entre otras cosas porque consideraba que Lunes de Revolución era una revista propia de la burguesía decadente con miras vanguardistas y cosmopolitas (dos puntos negros para el comunismo intransigente).

Otro asunto es el de Raúl Castro, hermano del líder máximo y Primer Ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, que entre otras cosas no cuenta con el respaldo popular por la sospecha de homosexualidad que sobre él se cierne.

A pesar de estos negros augurios, Virgilio Piñera decidió permanecer en Cuba, él, que antes de la Revolución había vivido casi quince años en Argentina, y continuó publicando sus obras de creación y colaborando en las nuevas revistas literarias surgidas en el seno de la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba (nacida tras el primer Congreso de Intelectuales): La Gaceta y Unión.

En el año 65, la política homofóbica se agudiza y a su término un gran número de artistas y escritores son enviados bajo el delito de homosexualidad a los campos de la UMAP (Unidades Militares de Ayuda a la Producción, creados en el año 1964 y situados en torno a la provincia de Camagüey, donde se sometía a los presos a trabajo forzado y a adoctrinamiento político). Cuando en 1967 el escritor español Juan Goytisolo visita Cuba, Piñera le informa de que existen más de 60.000 homosexuales presos y le transmite su pavor.

El documento que sirvió para la condena internacional del régimen cubano por la vejación de los derechos humanos en estos cuasi-campos de concentración fue el film de Néstor Almendros y O. Jiménez, Conducta impropia (10) (1984), donde se recogían testimonios directos de los presos y de su situación y de la persecución de los homosexuales en Cuba. Muy significativamente los autores le dedicaban su trabajo a Virgilio Piñera.

Siguiendo con el hilo cronológico es en 1968, cuando la política institucional se recrudece y en el Congreso de Escritores y Artistas se decide que los jurados de los premios de la UNEAC habrán de ser cubanos, y los de Casa de las Américas militantes que favorezcan a los escritores latinoamericanos que permanezcan en sus países y no en Europa. El poder estaba en manos de dos viejos miembros del partido: Nicolás Guillén y José A. Portuondo.

Con Lezama Lima

El cerco se estrecha por todos sitios y en septiembre, la Seguridad del Estado efectúa una redada en el hotel Capri y lugares aledaños (hotel Nacional y la heladería Coppelia, lugar tradicional de encuentro de homosexuales) en la que caen presos los sujetos considerados antisociales, a saber: personas que lleven el cabello largo, objetos extranjeros (relojes, por ejemplo), vestidos fuera de lo establecido o (y de alguna manera, es decir,) presuntos homosexuales. Los detenidos permanecieron presos durante un año e incluso más tiempo.

Será en 1969, año en que Piñera publica el conjunto de su poesía bajo el título de La vida entera, cuando se cierre el capítulo de su ejercicio literario legitimado, pues en los diez años que le quedaban de vida no volvió a ver publicada ninguna de sus obras, al tiempo que sus artículos y colaboraciones quedaban bastante menguados. A partir de ese momento las reuniones literarias se efectuarían en secreto, tanto en La Habana como en casa de la poeta Carilda Oliver Labra, en Matanzas.

Tras el caso Padilla (1971), la intransigencia más severa se institucionaliza y en el Primer Congreso Nacional de Educación y Cultura (celebrado en abril) se toman las siguientes medidas: se legisla sobre la propiedad intelectual y el patrimonio nacional, todo trabajo artístico pertenece a la Nación; se prohibe el reconocimiento de artistas homosexuales por ser éstos enfermos patológicos, amén de personas inmorales; de la misma manera se entiende que éstos no podrán ocupar un puesto en la educación ni en actividades culturales o representar a la Revolución en el exterior.

Reinaldo Arenas cuenta lo que derivó de este congreso en ese otro estremecedor testimonio que es Antes que anochezca habla del "parametraje", ya que los homosexuales con cargos públicos comenzaron a recibir telegramas en los que se les comunicaba que "no reunían los parámetros políticos y morales para desempeñar el cargo que ocupaban" .

Para no dejar ni un resquicio los delitos contra el desarrollo "normal" de las relaciones sexuales estarán penados hasta con 30 años de prisión o incluso con pena de muerte, que es legalizada también en este momento.

Finalmente, y entre otras cosas, se prohibe hacer ostentación pública de moda aberrante y extravagante que denote la dependencia cultural de otros medios y que es susceptible de desequilibrar la unidad monolítica e ideológica del pueblo cubano.

Cuando Reinaldo Arenas cuenta lo que derivó de este congreso en ese otro estremecedor testimonio que es Antes que anochezca habla del "parametraje", ya que los homosexuales con cargos públicos comenzaron a recibir telegramas en los que se les comunicaba que "no reunían los parámetros políticos y morales para desempeñar el cargo que ocupaban"

La obra de Piñera quedaba totalmente censurada en Cuba, así como su publicación en el extranjero. Su homosexualidad fue la máscara que justificó el castigo merecido por no integrar la nómina de escritores fieles a las consignas promovidas por el estado y seguidores de la línea pseudo-literaria que se exigía.

En el caso de Lezama Lima el proceso no fue diferente, aunque sí más discreto. Paradiso se publica en 1968, pero se prohibe hacer reimpresión de la obra no exactamente por sus pasajes homosexuales, que parece ser fue uno de los argumentos esgrimidos en la crítica contra el libro, ni por la filiación sexual del autor, sino porque la visión que Lezama tenía de la literatura no era el ideal que la Revolución necesitaba.

Apunta Jorge Edwards en Persona non grata:
"El activismo riguroso de Fidel, que parecía aprendido de sus preceptores jesuitas, para quienes el ocio es el origen de todas las depravaciones, no se avenía en nada con la asombrosa sensualidad contemplativa de Lezama, única en todo el ámbito de la cultura en lengua española".

A pesar de la prédica que su figura y su obra tenían en el exterior y del interesado uso que el gobierno cubano hizo de ella en ocasiones, Lezama vivió a partir de la delación de Padilla (que le acusó de contrarrevolucionario), en una situación de carestía material, olvido institucional y abandono por parte de aquellos "amigos", la mayoría de los origenistas, que tanto le debían, y que ahora andaban representando lo que tocaba. A su muerte salió una breve mención en el único periódico de la Isla. Ningún reconocimiento ante la desaparición de una de la mayores figuras literarias de la historia de las letras cubanas que descansa en un olvidado foso del cementerio Colón en La Habana.

No dejaré de mencionar el caso de Reinaldo Arenas que es el vivo exponente de una generación que sufrió por completo el proceso de estalinización de la Revolución cubana. Cuando en 1980 la guardia de la embajada del Perú en La Habana se retira entran en ella más de diez mil personas pidiendo refugio. Fidel encontró una salida airosa: abre el puerto del Mariel, cercano a La Habana, por el que salen más de 125.000 personas durante casi tres meses. Por supuesto, se embarcó a todo aquel considerado antisocial o escoria, delincuentes y presos comunes, deficientes mentales y homosexuales (18.750, un 15% del total).

Este hecho fue sintomático en la medida en que supuso una reordenación de los paradigmas ideológicos que reposaban sobre la presunta estabilidad y unidad de la sociedad cubana. Entre éstos desterrados se encontraba Arenas quien ponía fin así a una historia personal de persecución y violencia. Su obra, escrita dentro y fuera de Cuba, es única dentro de los autores de su promoción y necesaria para entender la literatura y la historia cubana de este siglo.

A partir de 1985 se inicia el proceso de rectificación de errores que devenía de los nuevos parámetros ideológicos que se imponían en la Isla. En este momento es el campo artístico, al cual se había incorporado una nueva y potente generación, el que da el salto que desborda los cauces por los que operaba la política cultural hasta ese momento. La conmoción socio-política, pero sobre todo económica, que supuso la caída del bloque socialista, que abre el llamado "periodo especial", y las secuelas emergentes de la política de intervención armada de los años ochenta son dos de los planos que mayor poder adquieren en la conformación de una nueva perspectiva ideológica que va a venir definida por los jóvenes autores.

El fenómeno resulta bastante complejo y escapa del objetivo de estas líneas, pero la acción creativa de la generación que se manifiesta a finales de los años ochenta (nacidos todos dentro de los márgenes de la Revolución y con una cosmovisión y un habitus diferente de aquellos que la habían vivido como conquista) representa la conformación de un nuevo arte en Cuba. Lamentablemente, la política gubernamental no supo atender a los reajustes que el nuevo momento histórico exigía y muchos de ellos residen hoy fuera de Cuba.

En el terreno de la escritura han sido varios los que se han posicionado dentro de un espacio de literatura gay. Lo que en principio fue en los primeros años noventa un leve pronunciamiento se ha convertido hoy, que finaliza la década y el siglo, en un espacio visible. El grupo de más sólidos creadores se articulan en torno a la figura de Antón Arrufat, discípulo de Piñera, que también sufrió duramente la segregación y la exclusión del campo literario en los momentos de intransigencia de los que hemos hablado. La descomposición interna de los paradigmas ideológicos y sociales (lo que, por otra parte, ha deteriorado al pueblo cubano en los últimos cinco años de manera alarmante) no permite ya una censura explícita al homosexual.

Al tiempo la lucha y militancia de muchos artistas homosexuales ha defendido la calidad de su identidad. Entre ellos podemos citar a Pedro de Jesús López (1970) que ha publicado en diferentes revistas y en España tiene una colección de cuentos, Maneras de obrar en 1830. Otro escritor que trabaja en esta zona es Abilio Estévez que recientemente sacó a la luz en Tusquets su novela Tuyo es el reino, dedicada a quien fuera su maestro, Virgilio Piñera. En lo que toca a la mujer el acceso es, en una sociedad latina y machista, más lento y meditado. La joven escritora Ena Lucía Portela (1972) ha abordado la temática lésbica en algunos de sus cuentos que son fruto de un elaborado proceso de creación.

No obstante, el campo artístico en Cuba sigue manteniendo una estructura de dependencia con respecto al campo ideológico y de poder, el avance ha sido impuesto por la nueva situación internacional y por el valor de muchos autores que arriesgaron su seguridad para enfrentar el hecho artístico desde una perspectiva de ética personal. El camino de un buen número ha sido el exilio, el de otros bandearse a diario con las duras condiciones que imperan en Cuba.

Llevado por el gobierno Cubano a la total marginación. Una gloria de Cuba convertido en un insignificante traductor, de una perdida institución.

Las figuras de Lezama Lima y de Piñera están siendo reinstauradas en el corpus de la crítica literaria, pero no ocupan el lugar que debieran en las enseñanzas generales de literatura cubana. La poesía de Piñera no se ha reeditado en Cuba hasta finales de este año pasado después de que se hiciera en México en el año 97.

De igual modo, la colección de sus cuentos tampoco es asequible dentro de su país, pese a que es uno de los autores con mayor influencia en la nueva generación. En lo que toca a Arenas, parece seguir siendo persona non grata dentro del aparato cultural oficial y ninguna de sus obras ha sido publicada en la Isla. Otras figuras, como la de Severo Sarduy que eligió muy pronto el exilio y que nunca se manifestó contra la política interna de Cuba, van siendo incorporados a través de artículos críticos en revistas especializadas. No obstante, su legitimación aún está por llegar. Quizás sea Sarduy el que está suscitando más adhesiones, precisamente por ser uno de los pocos, si no el único, escritor latinoamericano que desarrolló un verdadero credo queer en sus obras, especialmente en La simulación.

Todavía está por realizarse un análisis serio de lo que supuso la política homofóbica de los años setenta en el campo artístico y cultural de Cuba, así como está por escribirse una historia objetiva y fidedigna del devenir de un proceso, la mal llamada Revolución Cubana, que fue en un principio el sueño de una generación y la esperanza de un continente

Usted Opina

Periodistas Encarcelados

Laura Pollan

Cartas de Cuba

La otra Cara

Verdugos de su pueblo

Presidentes

Publicidad

http://www.elveraz.com/articulo362.htm

 



image

 

 

 

 

 

 

 

 

 



Castro se disculpa por la homofobia de la revolución

Centenares de gays fueron obligados a trabajos forzosos – "Fue una gran injusticia", dice el ex presidente cubano

EMILIO DE BENITO

Madrid 1 SEP 2010

No llega a pedir expresamente perdón, pero lo parece. En la primera entrevista concedida a un medio extranjero (el mexicano La Jornada) desde su reaparición pública, el ex presidente cubano, Fidel Castro, asume la persecución contra los homosexuales de hace medio siglo. Aquellas políticas fueron la causa de que centenares de homosexuales fueran enviados a las Unidades Militares de Ayuda a la Producción (campos de trabajo forzado) bajo la acusación de ser contrarrevolucionarios. Otros acabaron en el exilio. "Sí, fueron momentos de una gran injusticia, ¡una gran injusticia!, la haya hecho quien sea. Si la hicimos nosotros, nosotros… Estoy tratando de delimitar mi responsabilidad en todo eso porque, desde luego, personalmente, yo no tengo ese tipo de prejuicios", afirma.

"Nuestra sociedad no puede dar cabida a esa degeneración", afirmó Fidel en 1963

MÁS INFORMACIÓN

Más adelante asume que él fue el responsable de esa "injusticia". "Si alguien es responsable, soy yo", dice. Aunque se justifica: "En esos momentos no me podía ocupar de ese asunto. Nosotros no lo supimos valorar… Teníamos tantos problemas de vida o muerte que no le prestamos atención… Piensa cómo eran nuestros días en aquellos primeros meses de la Revolución: la guerra con los yanquis, el asunto de las armas, los planes de atentados contra mi persona…".

Pero que no lo supiera valorar no quiere decir que no le dedicara tiempo en sus discursos. Por ejemplo, en uno de 1963. "Nuestra sociedad no puede darles cabida a esas degeneraciones". También se permitió especular con por qué hay gays: "Yo no soy científico, pero sí observé siempre una cosa: que el campo no daba ese subproducto. Estoy seguro de que independientemente de cualquier teoría, hay mucho de ambiente y de reblandecimiento en ese problema. Pero todos son parientes: el lumpencito, el vago, el elvispresliano, el pitusa".

image

La situación, sin embargo, ha cambiado, al menos oficialmente. Como reconoce la Asociación Internacional de Lesbianas y Gays (ILGA por sus siglas en inglés), en este momento en la isla no están perseguidas legalmente las relaciones entre hombres o entre mujeres, aunque eso no evite una cierta discriminación social. Tampoco hay diferencia en la edad de consentimiento. Además, de la mano de Mariela Castro, hija del presidente Raúl Castro y directora del Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), desde 2008 el Estado financia las operaciones de cambio de sexo.

* Este articulo apareció en la edición impresa del Miércoles, 1 de septiembre de 2010

 

http://elpais.com/diario/2010/09/01/sociedad/1283292007_850215.html



Los primeros fusilados de Fidel Castro

En su serie ‘1959’ el pintor y escritor cubano Juan Abreu homenajea a las primeras víctimas del régimen criminal castrista.

José María Albert de Paco

2016-07-24

8

‘1959’ retratos de los fusilados de Fidel Castrol

Hay una escena en Antes que anochezca, el biopic de Julian Schnabelsobre Reinaldo Arenas basado en sus memorias homónimas, en que el protagonista se refiere a los hermanos Abreu, Juan, José y Nicolás, escritores como él, como "las hermanas Brontë". No aparecen más que en ese instante, aunque en verdad habitaron una parcela más ancha, pero sobre todo más honda, de la vida de Rey. En 1974, cuando el régimen declaró a Arenas en ‘busca y captura’, éste trató de zafarse de la policía ocultándose en el Parque Lenin, un delirante mausoleo ajardinado en el extrarradio de La Habana. Allí, camuflado entre yagrumas, caña brava y framboyanes, el prófugo no dispuso de otras vituallas que las que le procuró, jugándose el tipo, Juan Abreu. Suyas también fueron las cuartillas en las que, mientras había luz natural, Arenas fue escribiendo el embrión de su obra póstuma. De ahí, en parte, que ésta llevara por título Antes que anochezca. Hoy, después de haber conversado con Juan sobre aquellos días, las palabras de Arenas presentan una textura algo más rugosa:

Cuando la vigilancia se hizo más intensa, Juan iba hasta el lugar donde habíamos acordado encontrarnos y, en lugar de esperarme, me dejaba algo de comer. […] A los tres días de estar escondido vi a Juan caminando por entre los árboles. Se había atrevido a llegar hasta allí. Me dijo que mi situación era realmente terrible; para despistar, se había pasado el día tomando guaguas diferentes para llegar al parque.

Suyas también fueron las cuartillas en las que, mientras había luz natural, Arenas fue escribiendo el embrión de su obra póstuma.

Precisamente estos días se reedita A la sombra del mar. Jornadas cubanas con Reinaldo Arenas, el libro en que Juan relata la persecución a que aquella Cuba sometió a su amigo, y cómo ambos abandonaron la isla en el Éxodo del Mariel junto a otros represaliados, disidentes y detractores. El castrismo los tachó, con el patético desdén que suelen gastar las dictaduras, de "indeseables", y que fueran 125.000 no supuso problema alguno.

Juan vive hoy en Valldoreix, a la espalda de Barcelona, y no ha perdido la conciencia de ser un indeseable. De hecho, ha dedicado gran parte de su obra, tanto literaria como pictórica, a divulgar el modo en que Cuba los produce. Sus textos iluminan con descarnada lucidez el relativismo de la socialdemocracia europea, rendida a la entrañable fotogenia de la miseria cubana. Su más reciente puntualización respecto a La Pavorosa, como suele llamar a su patria, es de orden semántico: Cuba, además de cárcel, es un paredón flotante. Desde el triunfo de la Revolución, en 1958, Fidel y Raúl Castro han fusilado a cerca de 6.000 cubanos, según los registros más pesimistas, y a Juan se le ocurrió que debía inmortalizar, en una serie de retratos, a los muertos de los que tenía constancia: bastaban una foto y un nombre. La serie se llama, con cardinal luminosidad, 1959.

Sus textos iluminan con descarnada lucidez el relativismo de la socialdemocracia europea, rendida a la entrañable fotogenia de la miseria cubana.

De los fusilamientos también habló Reinaldo en su atardecer:

Después se crearon los llamados ‘tribunales revolucionarios’ y se fusilaba a la gente rápidamente: bastaba con la delación de alguien ante algún juez improvisado por el nuevo régimen. Los juicios eran representaciones teatrales donde la gente se divertía viendo cómo condenaban al paredón a un pobre diablo, que tal vez sólo le había dado una bofetada a alguien que ahora aprovechaba para vengarse. […] Han pasado más de 30 años y Fidel Castro sigue celebrando esos juicios teatrales y, desde luego, de vez en cuando, también los televisa. Pero ahora Castro ya no fusila a los esbirros de Batista, fusila a sus propios soldados y a veces hasta a sus propios generales.

En casa de Juan Abreu

Juan me ha citado en su casa, donde el estudio, que ha terminado por devorar el salón, es ahora una suerte de museo doméstico que procura al visitante una experiencia estética, es decir, moral, sin parangón. La cocina, pegada al estudio, no es del todo impermeable a esa experiencia, a la que hoy se añade un cierto aire festivo. Tanita, amiga de la familia, ha preparado tostón frito y arroz con pollo, y Juan ha abierto una botella de vino blanco, un verdejo tan risueño y moderno como él. Al poco se incorporan la mujer de Juan, Marta Sugrañes, y la reportera Anna Pazos, hija de Marta, recién llegada de Kazajstán. Mientras comemos, y como es costumbre con Juan, charlamos de literatura y mujeres, si bien el Gran Asunto se va abriendo paso en la conversación. Para Juan, el metro patrón de la infamia es Cuba, y cada vez que percibe en su entorno un rasgo de aquel crepúsculo, arruga la nariz. Como si Cuba hubiera ido diseminando por el mundo fragmentos de indignidad. Dentro, en el salón, aguardan los muertos.

Lo primero que llama la atención es el colorido. Al contrario de lo que cabría esperar de una serie elegíaca, ésta no irradia tristeza ni pesadumbre, sino luz, viveza e incluso júbilo. "No quería que remitieran a la muerte, al duelo, sino que fueran algo así como una celebración de la vida; en cierto modo, lo que he he intentado es restituir en sus rostros la alegría de vivir. Una redención. Eso es, sí, una redención; la acción redentora del arte". Realizados sobre tablillas cuasi cuadradas de no más de palmo y medio de base, los retratos de Abreu son los de un Matisse desprovisto de adustez; un Matisse, permítaseme, de la movida. Mientras que unos lienzos han pedido una técnica acuosa, como acuarelada, en otros prima la emplastadura ólea; los trazos, en cualquier caso, son igual de descarados: a semejanza de su escritura, la pintura de Abreu también carece de comas superfluas. Y además no hay tiempo, qué demonios, nunca lo hay.

Los retratos de Abreu son los de un Matisse desprovisto de adustez; un Matisse, permítaseme, de la movida.

La mayoría de los fusilados son de primera hora, de cuando la eferverscencia del proceso revolucionario propiciaba la confusión de los opositores con espectrales agentes del batistato. Individuos jovencísimos, culpables de lesa heterodoxia; liberales, conservadores, socialistas… Algunos de ellos visten uniforme de colegial. Abundan, asimismo, los militares; guerrilleros que, habiéndose rebelado contra Batista, se rebelaron después contra Castro. Juan personaliza la crueldad del fratricidio en el caso de Antonio Chao, del que dejó el siguiente retazo en su blog, Emanaciones, escrito a partir de la fotografía que le sirvió de modelo: "Mi hermano me manda una foto de Antonio Chao Flores, para mi serie 1959. Es un muchacho rubio que aún no tiene veinte años y que nos mira con una sonrisa algo triste me parece y los ojos verdes. Chao Flores combatió contra el ejército de Batista a favor de los llamados revolucionarios y hasta alcanzó la portada de las revistas al triunfo de los Castro por su juventud y por su carácter aguerrido. Acusado de traición, por declararse anticomunista y alzarse en armas contra los fidelistas, fue fusilado en la fortaleza de La Cabaña. Pocos meses antes, herido en combate, le habían amputado una pierna. A la hora de llevarlo a matar, los milicianos le quitaron las muletas con las que se mantenía en pie y fue obligado a arrastrarse hasta el lugar de la ejecución, según testigos. Al llegar al muro, Chao Flores, con grandes esfuerzos, se puso en pie y enfrentó a los fusileros. Dicen que sereno. El oficial al mando del pelotón de fusilamiento consideró necesario darle tres tiros de gracia".

En la labor de recabar los nombres y los rostros de los fusilados, Juan ha contado, además de con la ayuda de su hermano, con la de gentes como María Werlay, de la asociación Archivo Cuba; de Luis González Infante, ex preso político, que le envió su libro Rostros/Faces, donde recopila fotografías de víctimas del castrismo. A menudo, han sido los propios familiares de los muertos quienes le han hecho llegar la información. Hasta el momento (este artículo se acabó de redactar a finales de mayo),Juan lleva 301 retratos.

El invierno está llegando a su final y en la piscina de los Abreu Sugrañes late la promesa de un verano eterno. Nada como ese caldo, me digo, para apreciar la vileza del mundo. Del mundo, sí. De vuelta al salón, y entre el ramal de fusilados que asciende por el pasillo, reparo en once retratos algo más desleídos, que forman una especie de cesura en el paisaje. "Son los israelís del septiembre negro, aquellos pobres desgraciados". La setembrina podría ser una hermosa manera de cerrar el círculo, pues en la génesis del proyecto figura la exposición londinense que la artista sufafricana Marlene Dumas dedicó a los muertos del conflicto palestino, y que tanto conmovió a Juan. También, claro está, las fotos de Willy Uribe de los escenarios de los atentados de ETA, publicadas en 2009 en nuestro Factual, coincidiendo con el día y la hora exacta de los crímenes. El círculo, no obstante, sigue abierto. Al cabo, no hay nada tan obsesivo como el afán de justicia. A los fusilados de Fidel seguirán los 43 de Iguala, y a éstos los 21 de Hipercor. La vileza, en fin.

 

http://www.libertaddigital.com/cultura/historia/2016-07-24/los-primeros-fusilados-de-fidel-castro-1276578821/

Deja un comentario